COMPLEJIDAD DEL VIVIR BIEN

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Si se busca medir el bienestar de una población, lo que muestren los indicadores utilizados dependerá de la noción de bienestar. En Bolivia se ha propuesto el vivir bien (suma qamaña, sumaq kawsay), el vivir en armonía con la naturaleza y entre los seres humanos.

Pero, aún si solo revisamos las etnocategorías, este concepto se complejiza porque: 1) el qamaña, por la alta productividad del lenguaje, se desglosa en varias categorías; 2) el qamaña no es la única concepción de ‘vivir’; 3) el suma es solo una más entre varias cualidades de lo bueno o justo; y 4) las combinaciones entre estas nociones dan lugar a diversos tipos de gestión económica, política, social y cultural.

[1] El significado de qamaña es <estar/pasar>, es decir qama- es <estadía>, que entraña el sitio (qamaña es un lugar para merendar en el pastoreo) e implica el tiempo, disfrute y compañía (por ejemplo ) 1 . Puede incluir la comodidad material (de ahí que qamiri sea ) pero excluye la desarmonía2 . Entonces significaría algo como .

En un idioma aglutinante como el aymara, el verbo qamaña puede combinarse con varios sufijos derivativos y aspectuales, que modifican el significado del morfema base (la raíz). Por ejemplo qamaraña <‘estar’ uno tras otro>, qamt’aña <‘pasar’ apegado/sosegado>, qamayaña , qamasiña <‘estarse’ uno mismo>, qamaniña , qamkaña <‘estar’ todavía>, qamaskaña , etc. Y el verbo se nominaliza en forma abstracta: qamawi o el lugar de su acción y efecto.

[2] Al hablar de una concepción biocéntrica podríamos revisar los conceptos de ‘vida’; y vemos que en aymara las formas de acontecer la vida se conceptúan de tres formas más (aparte del qamaña). Por una parte tenemos el jakaña , pero éste concepto encierra cuatro significados: la <placenta, útero> que cobija la vida, la o lo que no está muerto —apagado (jiwata) o desaparecido (chhaqhata)—, el o radicar en una morada, y el o curarse la herida, cicatrizar. Verbo que igualmente puede afinarse en otras categorías, como jaktaña <empezar/recobrar la vida>, jakkiri , etc.

Otra palabra es el utjaña . Deriva de uta , pero adquiere tres sentidos: el o tener realidad, la <provisión> o tener almacenado y el o residir. Esta forma de ‘vivir’ tiene que ver con ‘lo que hay’ o lo que se tiene en el mundo y entre los humanos (su hogar), el aprovisionamiento. Que igual se diversifica: utjkaya , utjthapiña , utjawi , etc.

Está presente también la idea de transcurrir o transitar. El saraña es caminar la ruta (thakhi) pero implica retener o estar en lo andado. Es el concepto que mejor se muestra en sus derivaciones: sartaña <levantar(se)>, sarantaña , sarxataña o empezar, sarthapiña , saraqaña , sarayaña , sarawi , sarnaqaña 3 , sarnaqawi o acervo de lo recorrido, saramukuña , saraskaña , etc.

[3] Ahora bien, ¿con qué categorías se juzga algo como bueno o justo? El “andar bien” en aymara tiene que ver más con lo ‘bueno’ (la virtud) que con lo ‘justo’ (el deber)4 . Existen cualificaciones universales de una acción o de un estado de cosas:

  •  wali que indica lo suficiente, correcto o satisfactorio, como una apropiada proporción para el equilibrio de algo y lo satisfaciente o estado adecuado de una persona (como la buena salud) —la mesura y prudencia en la medida—, y una valoración global que controla la inclinación contingente o la propensión;
  •  suma que —más allá del hedonismo y el sensualismo del placer efímero— significa el gusto y complacencia, lo agradable que puede ser alguien o algo, tanto en cuanto a la bondad (como el valorar la franqueza, la empatía y el estado emocional), como también al disfrute, goce y deleite (como el saborear un alimento);
  •  aski que se refiere a lo que es corregido, conforme y útil5 (como las condiciones propicias del entorno), que provee un beneficio por sobre lo habido —no tanto como ‘recompensa’ sino como ‘esperanza’—, que conviene al ‘interés’ general o que rectifica y repara alguna falencia6 ;
  •  kusa que define lo óptimo, que está en su punto o cumple su propósito de sobremanera (como el mejor ejemplar de una cosa, animal o acción humana), y puede ser también lo sublime, noble, excelso y elevado —es algo parecido al perfeccionismo antiguo occidental, pues enaltece y exalta la virtud cívica—;
  •  yäpa que lo expresa en su cabalidad, efectivo ‘como tiene que ser’, lo muy bien hecho (como la excelente construcción o la pulcra elaboración), o que sucede de modo justo y pertinente, pues plasma su orden o consuma su naturaleza;
  •  wakisiri , lo que es preciso para que una situación esté equilibrada, lo que hace falta para llegar a lo bueno o lo importante que está pendiente de cumplirse.

Froilán Laime Ajacopa

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1 Y no es solo familiar, como una visita de descanso, sino un estado comunitario. De ahí es que un título de los jilaqata (autoridades de comunidad) haya sido también qama amawt’a <sabios-guía que tienen buena palabra>. Y al parecer proviene del puquina qama .

2 La perturbación de lo apacible puede surgir por ejemplo de un munachi o un munañani , es decir alguien con prepotencia o ‘despotismo del querer’, pero de cualquier desequilibrio.

3 Sarnaqaña no es solo deambular sino andar de aquí para allá ocupado o dedicado a propósitos correctos. Por eso un iwxa dice jaqjamaw sarnaqaña .

4 No obstante, la rectitud moral se expresaría en el chiqapa y el deber deóntico para las acciones está marcado por el sufijo obligativo -ña (terminando con -wa), como en phuqhañawa .

5 No en el sentido del utilitarismo; pues lo ‘útil’ no se entiende como el interés pragmático por satisfacer necesidades inagotables —a la manera del axioma de la “utilidad marginal” en economía, que establece que el objeto de toda conducta humana es lograr el máximo goce (impulsado esto por la imposibilidad de obtener la plena satisfacción) y concibe la utilidad como la cualidad de los objetos para producir placer o evitar dolor— sino más bien como estar bien con un provecho regulado. Claro, siempre pueden incrementarse los niveles (juk’ampi <más>), pero no con un impulso desmedido al infinito, sino con alivio en estadios satisfacientes; pues el equilibrio es detenerse en lo adecuado. No se está en una búsqueda interminable de premios, sino en conformarse con lo bueno que se tiene al presente y que, eventualmente, puede incrementarse.

6 Esto podría parecerse a la noción utilitarista del ‘mayor bienestar’ colectivo (como la suma de utilidades individuales) si no fuera que aski contiene un sentido de corrección, de dirigirse hacia lo que es debido. Se busca maximizar la felicidad o la prosperidad; pero no a cualquier costo ni solo para la mayor cantidad (dejando excluidos y marginados) sino para todos.

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